Supuestos vs. Hechos

El día que me dejaron plantada

Si prefieres escucharme antes que leerme, aquí lo puedes hacer👇🏽

Pude escuchar la voz de mi papá como si fuera uno de esos angelitos blancos que salen en lo dibujos animados, diciéndome al oído “No supongas, seguro que no te dejó plantada”


Llegué al restaurante 30 minutos antes de lo acordado. Estaba repleto y me anoté en la lista de espera, porque cada vez que vamos a cenar a ese lugar, una de las dos llega más temprano para que nos den mesa a tiempo. Me dijeron que la espera era de 30 minutos y dije que no había problema porque justo nos darían la mesa cuando mi amiga llegara, así que todo cuadraba perfecto.

Luego de 25 minutos me dieron la mesa. Entré, me senté y esperé.

Pasaron 15 minutos, desde que me senté, y mi amiga, que es más puntual que la manecillas del reloj, no aparecía por ningún lado. No le escribí, me dije a mi misma que capaz había tenido un atraso inesperado y que pronto aparecería.

Como vi que pasaba el tiempo y no tenía ninguna señal de vida por parte de ella, en lugar de escribirle, le mandé un mensaje a mi hermana que decía: “Cristina, me dejó plantada… “Cómo se atreve?”. Mi hermana me dijo: ¿Y porqué estás perdiendo el tiempo aquí conmigo cuando es a ella a quien le tienes que escribir?

Así que, muy obedientemente y también un poco molesta por el desplante que me estaba haciendo, le mandé un mensaje muy amable como quien no quiere la cosa y esto fue lo que sucedió:

Dilo… Dilo!!!! Supuse lo peor, digno de un capítulo de la Rosa de Guadalupe donde una amiga ha sido plantada por su amiga y que desde ese día ya las cosas cambiarían y la amistad de perdería para siempreeeeee (Sí, con muchas e para que sea más dramático).

Supuse, como siempre me ha dicho mi papá que no haga. Supuse para hacerme daño cuando la realidad era completamente distinta, supuse porque eso era más fácil que averiguar lo que había pasado en realidad y… Supuse cuando era yo la única que había llegado tarde estando sentada en otro restaurante!!!

Así mismo, como la vida, son los negocios.

SIEMPRE SUPONEMOS

  • Suponemos que porque alguien hace 45 sesiones por mes, es feliz y que está triunfando cuando en realidad, esa persona necesita trabajar todo lo que puede, sin parar, para poder mantener a una familia o un familiar que ha caído enfermo.

  • Suponemos que una persona no pasa por ningún problema y hasta nos enojamos porque parece que es a nosotros que nos caen todas las plagas de Egipto juntas pero, no vemos que esa persona se levanta todo los días, en medio del caos que está siendo su vida, a dar la mejor cara porque es eso o no seguir avanzando.

  • Suponemos que estamos en el lugar correcto y juzgamos a los que llegaron primero y no nos damos cuenta que, ellos no llegaron primero, nosotros nos hemos equivocado de camino, por no querer escuchar consejos, no fijarnos en lo mejor para nosotros y sobre todo, por pensar que de alguna u otra forma, siempre tenemos la razón.

Algunas cosas dentro de tu vida y negocio las supones pero no sabes realmente como son. En esa suposición te lastimas. Te comparas y es entonces cuando llega la infalible ruina. Una ruina que puede ser que no sea vea pero, en tu interior la sientes.

Ya no quieres postear más porque nunca llegarás. Ya no quieres planificar porque total a otros se les ocurren ideas mejores. Ya no quieres seguir aprendiendo porque no tiene sentido que inviertas en algo por lo que supuestamente jamás llegarás a ser el mejor.

Que hoy se acaben las suposiciones para ti. Que empieces a ver el césped verde de tu vecino por lo que es, un césped que ha sido cuidado cada día desde temprano y que no es por arte de magia o sólo un golpe de suerte que tenga ese color, es por el sacrificio que tu no ves y que tu vecino está haciendo sin hacer mucho alarde de eso.

Suponer es fácil (Dímelo a mi) pero, enfocarte en ti, tu negocio y tu meta es lo que realmente hace la diferencia.

Construye tu negocio sobre una roca firme de hechos y no sobre una duna de arena de supuestos.

Be Fantastic ⭐



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